Noviembre, 2024
Swami Sivananda fue un gran maestro contemporáneo que en su síntesis del yoga nos dejó como fundamentos cinco principios básicos:
el ejercicio adecuado
la respiración adecuada
la relajación adecuada
la dieta adecuada
el pensamiento positivo y meditación
Independientemente de seguir, o no, un estilo de vida yóguico, tiene sentido¿cierto?
De que la clave de tener una vida equilibrada fácilmente se puede resumir en esos puntos. Hay muchos estudios de la ciencia moderna que lo han ratificado. Pero hace centenares de años ya existía una civilización que por experiencia propia lo descubrió a través de observar la vida misma.
EJERCICIO ADECUADO: asanas.
Mantener el cuerpo sano, fuerte y flexible a través de movimientos, estiramientos y dominio de posturas. Se estimulan también los órganos internos, el sistema endocrino y la columna vertebral. Aunque existan muchas maneras de trabajar con el cuerpo físico se recomienda hacerlo de forma metódica e introspectiva. El saludo al sol es una manera dinámica y maravillosa de hacerlo también. Hoy día existen muchos estilos, por lo que recomiendo siempre encontrar aquel que resuene contigo y tus necesidades.
RESPIRACIÓN ADECUADA: pranayama.
Una respiración superficial por factores mecánicos como una mala postura (p.ej: espalda encorvada) o por ansiedad es de lo más común hoy día. Sin la respiración no se puede vivir, pero no todos viven conscientes de ella. El pranayama son técnicas de respiración que nos devuelve ese vínculo con la respiración natural, también se utilizan para estimular o calmar el sistema nervioso. Una respiración adecuada suministrará de oxígeno/prana/energía vital nuestro principal combustible a cada célula y tejidos del cuerpo que lo hará trabajar en sus mejores capacidades.
RELAJACIÓN ADECUADA: savasana.
La relajación no es tarea fácil y no, no es tiempo perdido. Nuestro cuerpo está acostumbrado a estar listo para actuar en todo momento. Vivimos en constante activación muscular y agitación mental. Someternos a tanto estrés físico y psicológico debilita las capacidades y funciones del cuerpo y sus sistemas. El momento de la relajación de la clase puede ser odiada o amada por muchos. Es un momento que permite reposar en silencio y quietud, el objetivo es vaciarse por completo.
ALIMENTACIÓN ADECUADA: vegetariana/vegana.
Está más que demostrado que todo lo que ingerimos tiene gran impacto en todos nuestros sistemas: energético, endocrino, nervioso, circulatorio… La dieta yóguica debe ser saludable, fácil de digerir y nutritiva. Aquí entran conceptos complejos como ahimsa (no-violencia) y sátvica (pureza) . Es decir que lo que ingerimos debe tener esas cualidades. Si ingerimos alimentos de cualidades opuestas como la pesadez, la irritación y la agitación el proceso meditativo, por ejemplo, será mucho más difícil de alcanzar.
PENSAMIENTO POSITIVO Y MEDITACIÓN: vedanta y dhyana.
Antes de meditar [propiamente dicho] viene todo un proceso de preparación como el control de los sentidos, establecer la concentración, apaciguar el enfoque de pensamientos negativos y recurrentes. Una mente agitada imposibilita el trabajo interior. Por otra parte, las enseñanzas del vedanta nos recuerdan nuestra verdadera naturaleza y ese vínculo con la energía suprema/universal.
Con eterno aprendizaje
Vero